“NO HAY CAMINO PARA LA PAZ, LA PAZ ES EL CAMINO” ( Mahatma Gandhi).
Pensar la Paz, es el camino, el compromiso, y el deber de cada ser histórico que reconoce que está llamado a dejar este mundo, mejor de cómo lo encontró.
La Paz no podemos entenderla como mera ausencia de conflictos y violencia, fruto del equilibrio precario de las fuerzas, sino como el clima de acogimiento y confianza en el que es posible fundar encuentros valiosos.
Para lograr lo anterior es importante, Un profundo respeto por los demás.
- Es lógico que las personas y los grupos tengamos opiniones distintas y mantengamos posturas dispares, pero eso no debe degenerar en disputa sino en discusión fecunda.
- Creo personalmente y desde mi experiencia en el manejo de conflictos, (Pandillas, Barras, Desarme, presencia en Comunidades vulnerables, ) que construir la paz en el mundo, en Colombia exige la realización de la justicia social, pero, además, implica la práctica de las virtudes que favorecen la convivencia y nos enseña a vivir unidos, para cimentar entre todos lo que podríamos llamar y siguiendo la invitación del Papa Francisco: la CIVILIZACIÓN DEL AMOR.
- La Paz no es sólo el esfuerzo de un momento para evitar un conflicto, sino que se construye día a día, en la instauración de un orden personal, desde el corazón, liberándonos de resentimientos, egoísmos, envidia, mal pensares, hipocresía, y cerrando ciclos, que comprometan nuestras vidas a SER AGRADECIDOS CON EL PASADO, RESPONSABLES CON EL PRESENTE Y ESPERANZADORES CON EL FUTURO.
- · Un hombre pacífico no es un indolente, ingenuo o débil. Es alguien que ajusta su conducta a las exigencias del encuentro, defiende con todo entusiasmo, tenacidad y energía sus ideas y propuestas, pero siempre “con tolerancia y respeto”.
- Mi invitación de cada día en los diferentes medios de C Social, es hacer posible la paz, que es armonía, comprensión y reconocimiento del misterio del otro.
- En los actuales momentos la patria vive en un desconcierto total, y así lo veo y lo reflexiono, compartiendo mis preocupaciones con mí equipo de trabajo, pero muy especialmente en mis predicaciones. CREO EN LA PAZ, pero una paz con inmunidad, no es paz, una Paz en medio de tantas injusticias, donde encontramos a diario cinturones de miseria, hambre, desempleo, desplazamiento, boleteo, exclusión…..es difícil hacer posible la paz.
- Mientras la verdad no se revele, y se siga negando los crímenes cometidos contra la patria, genocidios, magnicidios, y no haya un compromiso de reparación, pidiendo perdón, sometiéndose a la justicia, y la PROMESA SAGRADA DE NO REPETICIÓN, las venas abiertas de esta patria, no se podrán cerrar, porque hay muchas heridas, llagas, fisuras y dolor en el corazón de la patria.
- Hay que EDUCAR a las presentes y futuras generaciones para una ética de responsabilidad, honestidad y justicia en equidad.
- La corrupción ha sido el signo maldito que ha bañado de sangre inocente el rostro de la Patria. HAY QUE FORMAR HOMBRES Y MUJERES ÚTILES Y NO IMPORTANTES, SI QUEREMOS TENER UN PAÍS, QUE RESPETE LA VIDA, SEA SOLIDARIO Y ASUMA LA PAZ COMO DON Y COMPROMISO CADA DÍA.
- En últimas: La Paz, no es el SILENCIO DE LOS FUSILES.
- Los invito a cambiar el pum por el son y a ser artesanos de la paz y no indiferentes ante la guerra: