Los Niños de primera comunión recibieron la luz del cirio pascual, como signo que Jesús es la luz que brillara en su corazones, y como primer acto padre e hijos se pidieron perdón mutuamente, luego se les invito a que estén unidos, a que vivan con amor, esperanza y a los padres a que se comprometan a seguir con la catequesis. Al final se le entrego la cruz de Jesús como signo de reconciliación y compartieron un ágape.
ES LA LUZ DE CRISTO, DEJALA BRILLAR
La noche de la luz, último paso para que los Niños de primera comunión reciban a Jesús en sus corazones.